15 nov 2009

Proceso de recuperación: al-anon y el hijo adulto.




Transcripción del tema que como oradora entregué el pasado domingo noviembre 8 con motivo del aniversario número 18 de Francia E. en la comunidad Al-Anon, el tema lo desarrollé a partir de los aportes de la doctora Claudia Black.

Tema: Proceso de recuperación: al-anon y el hijo adulto, este capítulo fue escrito por la doctora Claudia Black. Este capítulo se encuentra en el libro anaranjado que muestro arriba.

El libro "Al-Anon se enfrenta al alcoholismo" es un libro que compila diversos textos escritos por profesionales que utilizan la comunidad de al-anon como apoyo en la recuperación de sus pacientes, porque hay capítulos escritos por médicos, sicólogos, siquiatras, por clérigos, por inspectores de policía, y hay un capítulo escrito por la trabajadora social Claudia Black que se titula "Proceso de recuperación en el hijo adulto" y sobre este voy a comentar, agregaré además algunos apuntes que tomé de un nuevo libro que ella ha publicado recientemente y se llama "Nunca me ocurrirá eso".

Lo mejor para empezar es aclarar qué se entiende por el concepto "hijo adulto", se refiere al adulto que fue criado en un hogar afectado por el alcoholismo, y cuyas características principales son: 1. mayor dificultad para confiar en otros, 2. dificultad para expresar los sentimientos y pedir lo que necesitan. 3. experimentar mayor dificultad para relacionarse intimamente y ser más propensos para experimentar depresión.
Además sus problemas básicos son: no hablar, no sentir, no confiar, culpa, control y aislamiento. Y una que se repíte mucho: relacionarse con parejas afectivas que no están disponibles.

Además por haber convivido en un hogar afectado por la enfermedad del alcoholismo aprendieron que no era muy saludable hablar honestamente de lo que estaba pasando en sus vidas, por que al intentar hacerlo sentían verguenza, deslealtad, incertidumbre de que decir, no tuvieron modelos de comunicación, aparece un miedo a la reprimenda y temor a las consecuencias negativas que puedan aparecer al hablar.

Lo que nos cuenta la doctora Claudia Black en su texto es que ella atiende en la consulta personal a su paciente pero le muestra que el tratamiento será más eficiente si además de la terapia individual participa de las terapias grupales que ofrece la  comunidad de al-anon. Ella explica que debido a que los hijos adultos muestran gran miedo a los sentimientos, si asistie al grupo podrán obtener ganancias que no se consiguen en su consultorio. Por ejemplo nos cuenta que en el grupo, el paciente, aprende que puede hablar y que no hay verguenza pues los demás miembros no sienten que se puedan traicionar pues todos han vivido prácticamente la misma historia de dolor. También ven que en el grupo nunca hay reprimendas y los sentimientos toman la perspectiva correcta. Se sienten cómodos al compartir sobre: tristeza, timidez, ira y miedo. Además no se critica su sufrimiento, por el contrario se recibe comprensión y afecto. El grupo es un lugar sicológicamente seguro. Hay aceptación y amor incondicional. Y algo muy valioso: se aprende que no se es responsable de las cosas que no se tienen control, esto disminuye la culpa, comprende que no es el responsable del problema de la bebida que haya tenido o aún tenga alguno de sus padres, y finalmente comienza a desarrollar la autoestima.

Por supuesto que muchos pacientes se niegan a ir pero ella les indica que no nieguen la asistencia sin antes haber ido una vez y decidir si les gusta o no. Ella les enfatiza que un hijo adulto lleva una vida presente que es dominada por el pasado. Y que en lugar de pensar que no le va gustar el grupo debe concentrarse en la identificación con los demás miembros. Nos cuenta que en general la dificultad para ir al grupo se debe a 3 cosas, una por que el paciente cree que con sólo la terapia individual saldrá adelante;  2, porque por la negación del dolor empieza a considerar que "no es tan terrible" lo que le ocurrió en el pasado con su familia, y 3 cree el paciente que para asistir al grupo hay que ser religioso y eso lo incomoda, porque el niño que hay dentro del hijo adulto está  muy enojado con Dios, esto le produce verguenza y se aisla de Dios. Aquí la autora nos explica que es normal sentir enojo con Dios porque de niño o niña, el paciente se preguntó muchas veces..." porque Dios deja que me pase esto?".

Pero al-anon no es una comunidad religiosa, por el contrario, acepta todo tipo de creencias de sus miembros, pero sin entrar a polemizar o compartir, sencillamente el grupo entrega una manera espiritual de vida a través de la práctica de los 12 pasos de recuperación para empezar y luego aplicando otros principios, lemas, literarura, padrinazgo y servicio, y así cumplir la promesa que ofrece el programa de llegar a vivir una vida útil y feliz.

La doctora Claudia Black se ha ido especializando en el tema poco a poco, luego de graduada en Estados Unidos como licenciada en Trabajadora Social, empezó a trabajar en un centro de rehabilitación para las adicciones, ella trabajaba más que todo con las familias de los alcohólicos. Los alcohólicos hacían su tratamiento, y sus familias debían asistir a las terapias grupales para familiares, pues a través de estas terapias se irían recuperando del resentimiento, el enojo, el temor y todas las consecuencias que traía haber vivido con el alcoholismo activo de uno de sus padres, o esposo, o esposa o hijo, o hija o cualquier otro familiar. Recordemos que el alcohólico tiene la enfermedad pero las consecuencias del alcoholismo afecta a su familia, por eso se dice que el alcoholismo es una enfermedad familiar, porque así un sólo miembro de la familia sea el que ingiere el licor, los demás miembros reaccionan a la situación, se afectan emocionalmente por vivir con un bebedor problema. Muchos dicen..."el problema es de otro porque yo no bebo", pero lo que no sabe es que se termina bebiendo el resentimiento, la ira, la verguenza o la culpa, o la impotencia que le produce no poder controlar la bebida de su ser querido, el alcohólico.

Con el tiempo en estas terapias grupales la doctora se dió cuenta que las personas cuando estaban jóvenes decían..."Nunca me ocurrirá eso", refiréndose a que de jóvenes veían a un padre bebedor y se prometían no repetir esto, pero con el paso del tiempo terminaban en su vida adulta siendo bebedores; o por ejemplo las mujeres cuando jóvenes prometían que no repetirían las historias de sus madres, soportando la vida con un esposo borracho, y de adultas veían que estaban casadas con borrachos y repitiendo la historia.
Claudia Black se asombró al ver que la historia se repetía, sus pacientes habían dicho en la juventud: " Nunca me ocurrirá eso" y "Nunca seré así"....y todo se cumplía. Además observaba que la mayoría de las esposas de los alcohólicos eran hijas de alcohólicos.

Buscando más allá de lo que le había dado la universidad, se encontró con la Comunidad de Al-Anon y conoció sobre la recuperación que esta hermandad ofrecía a los familiares y amigos de los alcohólicos. Ella aprendió que los hijos de los alcohólicos podían recuperar lo que habían perdido, la posibilidad de una vida útil y feliz. Y además que muchos adultos en su actualidad enfrentaban problemas que traían cadenas del pasado. Ella observó que hay adultos que fueron criados en un hogar afectado por el alcoholismo y las situaciones de la infancia condicionan la vida adulta.

En sus observaciones vio que hay tres tipos de hijos de alcohólicos,  está primero el Responsable, suele ser el mayor, se convierte fácilmente en el sustituto de la madre o padre, consigue en su vida éxitos muy rápidos y al rededor de los 26 años hay un declive porque al ver resuelta la vida profesional y económica no sabe hacia donde dirigirse, así que fácilmente termina bebiendo y puede desencadenar el alcoholismo, un alcoholismo más bien solitario.
Está el Adaptador, lleva una vida de montaña rusa, necesita voltaje en sus acciones, hay épocas de dinero y trabajo y luego alterna con épocas de escaces y estreches. En la vida fácilmente desarrolla el alcoholismo en las fiestas.
Y por último está el hijo menor, suele convertirse en el Conciliador, es quien más culpa carga y por eso tiene unas tendencias muy grandes para terminar estudiando sicología. Tambien puede ser bebedor problema.
Hay otro tipo de hijo adulto pero en poco número y se les llama Sobrevivientes, son quienes no se tornaron alcohólicos y tampoco se casaron con adictos.

El 50 por ciento de los hijos de los alcohólicos terminan siendo alcohólicos.
Los 3 tipos de hijos mencionados arriba, comparten algo, y son las 3 preguntas que se hacían de niños cuando su padre o madre bebedor problema, bebía o les castigaba. Las preguntas son: 1. "¿Porque mi padre y/o  madre hace eso?". 2: "Yo que hice?" y 3:"Que puedo yo hacer para que él/ella sea diferente?".
Estas preguntas van llenando al niño de una serie de secretos, porque el hijo adulto nunca considera a los demás como recursos de ayuda, por eso es muy solitario y cae fácilmente en el abatimiento, esto lo lleva a tener dificultad para disfrutar la vida pues "es más seguro no tener en cuenta los sentimientos".


6 feb 2009

Los Dioses de La Embriaguez.



Viñedos Egipcios
Fuente:http://elantiguoegipto.galeon.com/





Las antiguas culturas consideraban que todo tenía una explicación mágica, especialmente temas trascendentales como la vida, la muerte, la enfermedad y la salud. La salud era dispensada por los dioses y las enfermedades por los demonios.

Estas últimas llegaban cuando el individuo se había separado de sus dioses y estaba desarmonizado con él mismo y con la naturaleza.


Por eso en Babilonia, hace más de 5000 años, cuando el enfermo visitaba el médico, este antes de preguntarle que le dolía, le formulaba las siguientes preguntas: ¿ se ha enemistado con su padre?, ¿se ha enemistado con su hijo?, ¿ha mentido?, ¿ha engañado el peso de la balanza?. Estas preguntas y otras similares están talladas en la piedra que contiene el Código de Hamurabi, sección salud donde también se especifica que si el paciente es esclavo paga menos que si es libre.


Pero hoy no nos formulan estas preguntas en el consultorio médico, en cambio, cuando el individuo decide ser honesto con él mismo y muy seguramente descubre que su alcoholismo tenía diversos orígenes y que además cargaba con el resentimiento producido por la enemistad con un padre o con un hijo, también sabrá que ha mentido y seguramente ha robado. Los médicos babilonios sabían que toda enfermedad antes de ser del cuerpo había sido de la conciencia. Este principio de enfermedad como desarreglo del alma lo encontraremos también en la India y en la China, ambas culturas milenarias e imperiales consideraron que la enfermedad se manifestaba cuando había ocurrido un desequilibrio en la conciencia y que luego este se manifestaba en la mente y posteriormente en el cuerpo. Los Griegos lo especificaron al decir que toda semilla de la enfermedad procedía de: el miedo, la ira, la envidia y la avaricia.

Estas llamadas antiguas civilizaciones, al comprender que se necesita de una manera específica para evitar y tratar la enfermedad, propusieron cultivar la armonía espiritual, pues un individuo que está en armonía consigo mismo, en armonía con sus dioses y en armonía con la naturaleza, está saludable. Esa armonía se alcanzará mediante la práctica de los rituales que ofrece la misma cultura. Rituales que festejan y celebran iniciaciones: por ejemplo de la infancia a la pubertad, de la juventud a la madurez, para la siembra y cosecha, para matrimonios o campañas militares. Todos estos rituales eran organizados por sus sacerdotes o sacerdotisas y el individuo que participaba en ellos alcanzaba gozo y éxtasis espiritual. Todos los seres humanos somos espirituales por naturaleza, pero en el mundo antiguo era una necesidad y una manera de vivir, hoy desafortunadamente, el mundo contemporáneo no tiene tiempo para presidir rituales, sólo la búsqueda afanosa del trabajo y el dinero se hace imperante, nuestro espíritu vive ávido de experiencias espirituales y de gozo, sin tenerlas a mano.

Todos somos sensibles y estamos buscando un ritual que nos entregue una alegría, algunos vivirán con esta carencia, otros conseguirán colmarlos, pero otros como los alcohólicos, altamente buscadores de la verdad espiritual, buscarán rituales de manera desenfrenada, y los entregados por las religiones seguramente no alcanzarán a deslumbrarles sus complejos egos, y habiendo perdido la guía, se encontrarán sin esfuerzo alguno con el ritual que ofrece por estos días un falso mago: el alcohol.

No en vano el doctor Gustav Jung, respondería al cofundador de A.A (alcohólicos anónimos) Bill W. varias misivas para despejar dudas sobre el tema, recordemos algunas de las palabras del eminente siquiatra suizo: “…en un alcohólico …el ansia del alcohol es el equivalente a un nivel bajo de sed espiritual de nuestro ser por la integridad que expresado en un lenguaje medieval, es la unión con Dios…estoy fuertemente convencido de que el principio del mal que prevalece en este mundo conduce a la perdición, a la necesidad espiritual sin reconocer, si no es contrarrestado por una percepción religiosa real o por el muro protector de la comunidad humana. Un hombre ordinario que no esté protegido por la acción desde lo alto y se encuentra aislado de la sociedad, no puede resistir el poder del mal, al que aptamente se le llama Diablo”.


Por ello una cultura tan cercana a nosotros como la Griega, de quienes hemos heredado bastante para nuestra civilización occidental, tenía tan claro que la ebriedad existía y era peligrosa, que debía ser trataba con prudencia. En sus rituales, se invitaba a la población para compartir con los sacerdotes representantes de todos los dioses y semidioses, incluido Dionisio, dios Tracio de la uva y el vino, pues se sabía que era tan peligroso, que excluirlo significaba atraer su ira, entonces se bebía de manera sagrada, es decir sólo se ingería licor cuando se participaba de rituales y ceremonias religiosas, no era permitido beber por fuera de los rituales.


Baco Ebrio de Miguel Angel
Fuente: http://www.polomuseale.firenze.it/
                                                                


Las fiestas especiales de Dionisio eran las Bacanales, fiestas misteriosas y secretas que se efectuaban el 16 y 17 de marzo exclusivamente para mujeres, y luego para los hombres en otras 5 fechas repartidas a lo largo del año. Dionisio era hijo de Zéus, pero como nació de una relación extramatrimonial, la esposa de Zeus trató de matarlo, el niño pudo escapar, y como venganza, creó a partir del descubrimiento de la uva, fruto que cuidaba el dios Saturno, el néctar para emborrachar a los mortales y generar caos. Dice la leyenda que Dionisio tomó unas semillas de uva y las plantó en un hueso de pajarito, al ver que crecía y necesitaba más espacio las transplantó en un hueso de león, pero como creció más las puso en un hueso de burro; y es por ello que quien se embriaga primero es alegre como un pajarito, luego se siente fuerte como un león y finalmente termina haciendo estupideces como un burro. Luego cuando los romanos conquistaron a Grecia, adoptaron este dios con nombre de Baco. En la antigüedad entonces los griegos y los romanos, condenarían el beber fuera de las fiestas sagradas, seguramente mucha gente lo hizo, a escondidas, pero las leyes ya contemplaban que habían entidades muy fuertes detrás de la embriaguez.

Tomemos otro ejemplo bien diferente: los árabes y los aztecas y miremos que agudeza para detectar el problema que trae el alcohol. Los árabes nos cuentan que en la constelación de Perseo, hay un planeta que se llama Al-Gol, los griegos también dieron cuenta de esta constelación, pero los árabes fueron más allá al narrarnos hace 1400 años que ese nombre es árabe pero que traduce Demonio, y como es tan peligro con solo evocarlo, se prefirió no mencionarlo siquiera, así se determinó llamarlo Al-Kwel, que traduce “el sutil que divide en dos”. Este demonio vive en el planeta de su mismo nombre y cuando visita la Tierra se introduce en las botellas que contienen bebidas embriagantes de tal manera que al beber el individuo se está ingiriendo este demonio, y si no se bebe, entonces él se marcha evaporándose rápidamente hacia su planeta donde habita.



el innombrable
Fuente: del catàlogo astronòmico de Hevelius de 1690.

                                                                
Cuando los árabes estuvieron en España casi 800 años, muchas palabras se castellanizaron, y Al-Kwel pasó a ser Al –Cohol, hoy es Alcohol. Analicen ustedes mismos. Hoy en la mayoría de países árabes está prohibido el uso del alcohol.

Para terminar por hoy, deseo hacerlo con lo escrito por el Doctor Jung en su libro Psicología y Alquimia, en 1944: “ Los juegos de pelota se verifican en las iglesias, y quedaron abolidos relativamente pronto, en consecuencia de eso, el carnaval se hizo mundano y la embriaguez divina despareció de los lugares sagrados. A la iglesia le quedó el luto, la gravedad y la severidad y una alegría muy mesurada. Pero la embriaguez el más peligroso e inmediato de los raptos le volvió la espalda a los dioses y con su exceso se adueñó del mundo de los hombres. Las religiones paganas evitaban este peligro haciendo que el éxtasis de le embriaguez tuviera lugar dentro del culto pero la iglesia católica eliminaría el elemento dionisiaco, preferiría abolir las fiestas, las fiestas religiosas y ceremoniales. Donde se bebía de una manera sagrada quedaron eliminadas, se eliminó la fiesta pero no la embriaguez, la embriaguez salió de los templos a buscar a quien atrapar... la embriaguez es el más feroz de todos los raptos...."

Pero para que no digan que sólo estamos mirando culturas de otros continentes, de los Aztecas he encontrado algo muy interesante también: resulta que tenían hace 900 años el dios de la Ebriedad llamado OmeTochtli, este tenía forma de conejo y lideraba otros 400 conejos que salían a correr cuando un individuo se embriagaba, para perseguirlo y atormentarlo, estos eran los Centzon Totchtli, pero los 2 primeros conejos eran los más feroces, y sobre todo Quatlapanqui llamado el rompecabezas pues cargaba una hacha gigante para darle en la cabeza al que bebía y destrozarle el cerebro, el otro era Papaztac llamado el enervado que se encargaba de desatar la furia en quien bebía.




                                                         
La bebida era de carácter ceremonial, si alguien bebía fuera de los rituales permitidos, el embriagado se sacrificaba en honor al Dios Papaztac , pues él cuidaría de los ebrios intoxicados. En la zona arqueológica del Tepozteco, en la cumbre del cerro Tlahuiltepetl, se encontró un adoratorio dedicado a este dios cuya estatua fue destruida por Fray Domingo en 1538.

                                                                Doctor Carl Gustav Jung.


atte, almaluz hurtado borrero.

Alcohólicos Anónimos.



Video con 12 preguntas que te ayudarán a saber si tienes problemas con la bebida.


A continuación la presentación de que es A.A

ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS® es una comunidad de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo. El único requisito para ser miembro de A.A. es el deseo de dejar la bebida. Para ser miembro de A.A. no se pagan honorarios ni cuotas; se mantienen con sus propias contribuciones. A.A. no está afiliada a ninguna secta, religión, partido político, organización o institución alguna; no desea intervenir en controversias; no respalda ni se opone a ninguna causa. Su objetivo primordial es mantenerse sobrios y ayudar a otros alcohólicos a alcanzar el estado de sobriedad.


A continuaciòn las 12 preguntas  que te ayudarán a saber si tienes problemas con la bebida.

1 - ¿Ha tratado alguna vez de dejar de beber durante una semana o más, sin haber podido cumplir el plazo?

2 - ¿Le fastidian los consejos de otras personas en cuanto a su forma de beber, le gustaría que dejasen de entrometerse en sus asuntos?

3 - ¿Ha cambiado de una clase de bebida a otra con objeto de evitar emborracharse?

4 - ¿Se ha tenido que tomar algún trago al levantarse por la mañana durante el año pasado?

5 - ¿Tiene envidia de las personas que pueden beber sin meterse en líos?

6 - ¿Ha tenido algún problema relacionado con la bebida durante el año pasado?

7 - ¿Ha causado su forma de beber dificultades en casa?

8 - ¿Trata usted de conseguir tragos "extras" en las fiestas, por temor de no tener suficiente.

9 - ¿Persiste usted en decir que puede dejar de beber en el momento que quiera, a pesar de que sigue emborrachándose cuando no quiere?

10 - ¿Ha faltado a su trabajo o a la escuela a causa de la bebida?

11 - ¿Ha tenido "lagunas mentales"?

12 - ¿Ha pensado que llevaría una vida mejor si no bebiera?


En Cali, tel: 8803029, 8841759. En estos números te darán la dirección del grupo más cercano.
Vease más en: http://www.cnaa.org.co/

Recomendado Sitio en España.

Sitio en Argentina.

Sitio en USA

Sitio en Uruguay